Carta para…

Hola cielo, ¿Qué tal estás? Antes te vi por el centro con tu madre y no tuve agallas para saludarte. Estabas muy guapa, mejor dicho, tan linda como siempre.

Tenía pensado hablar contigo, explicarte y agradecerte tu confianza. Ahora esa confianza se vuelto para mí algo más, cosa que sentía desde hace ya tiempo, pero no sé, no estoy seguro de cómo ibas a reaccionar. Pero bueno, todo tiene su primera vez y si algo quiero tendré que luchar por ello.

Además estos días he estado pensando y tengo en la mente que eres la niña que me merezco y por lo que siento por ti quiero que ojalá seas la dueña de todo lo mío. Me has enseñado a saber qué es el cariño, que es ser feliz y que es lo que puedes hacer por una persona a la que quieres.

Como tú ya sabes, no soy un romántico, porque no es mi gran afición, pues lo que siento por alguien lo demuestro y no lo expreso por escrito. Pero contigo he conocido lo que es y el querer y me has hecho cambiar, en especial que una chica no solo es darte besitos y decirte te quiero, sino que es contarle lo bueno y lo malo de los problemas. Lo que dudas y lo que quieres saber de tu futuro con ella. Así que tenlo en cuenta y piensa que la gran amistad y el gran cariño que te expresaba e ha vuelto como algo más; no sé, para mí no tiene nombre ese sentimiento, pero solo quiero decirte que me des una oportunidad.

Te extraño.

( Samir Ahmed Kaddur. 1ºA Bach.)

La granja escuela

La granja es un sitio muy divertido y alegre. Al llegar con mis compañeros nos llevaron por el jardín y había un poni que tenía mala leche y nos quería dar una coz y nosotros queríamos escapar de él. Nos sentamos en unos bancos y Pedro nos empezó a hablar un poco de la granja, en qué consistía.

Comenzamos viendo las plantas: El girasol, la capuchina… y terminamos viendo los animales: Las vacas, las cabras, los pájaros, los patos, etc. Al final plantamos unas plantas llamadas capuchina. Yo me llevé dos porque Pedro me dejó. Antes de irnos Abdel Ali y yo hicimos un trato con Pedro; si cuidábamos las plantas bien él nos daba unas palomas llamadas culiplanas, pero si son las cuidábamos bien nosotros le dábamos dos jerezanas cada uno.

Al final estuvimos viendo los pájaros, las cod ornices, las perdices, etc, hasta que vino la coa y nos fuimos. Ojalá volvamos otro día para estar toda la hora.

                                                                                                                                     (Omar Hallal 1º A)

Carta para el día de San Valentín

Tú debes de tener dudas de cuánto te quiero y cuando tengas las respuestas…me gustaría mucho que me informaras de lo que sientes por mí, pues en estos momentos has entrado en un lugar demasiado especial en mi vida y en mi corazón. Tu mirada, tu sonrisa y tu preciosa cara que me llena de tantas cosas que no me atrevía a declararme ante ti. Sé que no soy muy buena para muchas circunstancias, pero poco a poco estoy aprendiendo y descubriéndome a mí misma, y tú has tenido mucho que ver porque en ese día creció mi cariño y nació mi amor por ti. No puedo prometerte nada porque es raro que las cosas resulten como yo las planeo. Tal vez sea mejor o tal vez no. No quiero prometerte que te llenaré de inmensa felicidad y no darte momentos odiosos…Hré lo mejor posible y lo imposible para que encuentres a mi lado esa felicidad.

Pensando en ti he escrito esto esperando que seas feliz a mi lado toda la vida junto a mí, pues la vida está hecha para poder disfrutarla. No sé si alguna vez has sentido algo así por una persona y es que sucede que el día que la conoces hay una impresión distinta, algo diferente en el momento de estrechar tu mano para saludar y sientes que es la persona de tu vida. Ahora en medio de estas palabras t doy un abrazo emocionante y te digo que para todo lo que pase puedes contar conmigo, porque no importa donde te encuentres ni el tiempo que transcurra; te llevo en mí y esto lo he escrito pensando en ti.

                                                                                                                            
(Chahira Mimun Milud)

Mohamed, Saida y el malvado Mercedes

La guerra llega a Mohamed inesperadamente a una pacífica aldea de las montañas de Saida. De la masacre, solo logran salvarse Saida y Mohamed. Un puñado de malvados atacaron la población de Mohamed y la dejaron quemada, reducida y en cenizas. Ellos estaban con Mercedes, el malvado rey de los soldados y también de los traficantes de esclavos. La única opción de Mohamed y Saida es huir e intentar iniciar uana nueva vida en algún otro país africano. Pero les llevarán a través de un continente soleado llamado El Sahara. 

Finalmente se casaron y tuvieron quince hijos, los cuales fueron guerreros. Y un día los malvados soldados de Mercedes atacaron la casa de Mohamed y Saida y los niños como ya eran grandes no despertaron a sus padres, sino que fueron a atacar a los malvados, que murieron todos. Mercedes juró volver, pero los hijos se ocuparon de que nadie se acercara a casa de sus padres.

Las garras del amor

Ayer yo era una chica feliz, y hoy de pronto me vi atrapada entre las aterradoras garras del amor. No sé cómo ni cuándo me enamoré de ti, si mi corazón iba solo por la vida libre e indiferente. ¿Cómo pudiste hacerle esto a mi pobre corazón atrapado en tus garras? Por mucho que intento escapar no puedo con su fuerza e intensidad.

El amor puede ser muy hermoso cuando es correspondido, pero cuando no es así, tu vida se convierte en un auténtico infierno. Te pasas los días llorando y las noches en vela sin poder dormir del dolor que siente tu corazón llorando lágrimas de sangre.

                                                                                                                                                (Saida El Miri)

El dueño de tus sueños

De ti nacería
un corazón cada día.
Mi amor por ti
crecería todos los días,
porque en tus sueños
yo soy tu dueño,
al cual tú mandarías
de noche y de día.
Con mi corazón herido
yo siempre sería tu amigo.
(Mohamed Al Hasane El Founti)

Carta para mi mejor amiga misteriosa

En mi clase hay una chica misteriosa y es mi mejor amiga. Ha estado conmigo en los momentos difíciles y la quiero y la adoro. Cuando me operé vino a verme vino a visitarme y le doy las gracias.

La chica misteriosa es una chica encantadora, la quiero como si fuera mi propia hermana y quisiera pedirle perdón de todo corazón por la pelea que tuvimos. Me encantaría reconciliarme con ella; de verdad te lo digo chica misteriosa.

El primer día que te vi me caíste bien. Cuando me acuerdo de todas las cosas bonitas que hemos pasado juntas, que sepas, chica misteriosa, que nunca te olvidaré, te lo juro por lo más sagrado que tenga en mi corazón. Eres el lucero que guía mi vida, si falta un día sin verte se me parte el corazón.

                                                                                                                                                 (Hanan 1º G )